Permíteme amigo Ricardo que te
envíe estas líneas sin que me las hayas pedido desde República Dominicana.
He leído tu excelente artículo sobre la tarta de queso. Y en Donosti. Joé, es
que me he sentido muy aludido.
Por eso, quiero compartir una anécdota contigo y con tus lectores de lo que
ocurrió hace muchos años en un famoso bar de la parte vieja de San Sebastián
con tres actores principales: el dueño del bar, 4 franceses y una tabla de
quesos.
Resulta que hace muchos años, unos franceses de Biarritz, iban asiduamente
a este bar del viejo a comer pintxos. Y siempre acababan con un plato de
queso Idiazabal y nueces. Se creó una amistad entre dueño y clientes. Un buen
día, el francės llamó al dueño del bar y le dijo que ese viernes volverían a su
bar y que les gustaría degustar ese queso Idiazabal en modo mousse, cosa muy
natural en la cocina francesa. La primera reacción del dueño del bar (calle
Fermín Calvetón) fué decir, ahí vá, qué quieren estos, Idiazabal en cuñas y nueces,
que mousse ni que tonterías. Me van a decir a mi como servir queso, joé !!!.
La mujer de este vascorro, lista
como el hambre, al día siguiente llamó al prepotente franchute y le dijo: “pas
de problem, mousse de Idiazabal.”
Compró dos terrinas de queso Philadelphia, hizo una base de tarta con
galletas y mantequilla, bien de gelatina para una buena textura y sirvió tarta
de mousse de Idiazabal (jejeje). Y además le vendió tres quesos enteros
al francés y la receta de la tarta. Tres semanas más tardes el francés volvió
al bar.
La aitona le pregunto, ¿que tal mousse de Idiazabal?. El contestó, mal.
Y ella le dijo: es que el Idiazabal sale de Guipúzcoa y no sabe igual y por
cierto … es tan buen queso que no hace falta hacerlo mousse como hacéis los
franchutes con el Cammembert y Brie.
Ahí lo dejo. Abrazos a todos
Borja Letamendía
Da gusto ver como los amigos se acuerdan de uno allá donde estén, y es que
Borja Letamendía se ha ido a hacer las Américas y está abriendo algunos
restaurantes en República Dominicana. Ha prometido compartir con todos nosotros sus andanzas por aquellos lares y descubrirnos los secretos GastroGenuinos más codiciados.
Aprovechando su historia, vamos a
ahondar un poco más en el Queso Idiazabal, uno de nuestros quesos preferidos, y
que en su formato de “viejo” dio origen a este Blog.
GastroGenuino con Maria Jesús comprando el último queso Viejo
La Denominación de Origen Queso
Idiazabal determina que la leche utilizada para hacer los quesos debe provenir
exclusivamente de ovejas de las razas Latxa o Carranzana. El queso con
denominación de origen Idiazabal, que toma su nombre del pueblo Idiazabal y sigue la receta tradicional utilizada durante
siglos por los pastores vascos. Se trata de un queso curado, con una maduración
mínima de dos meses
Idiazabal es una villa conocida
por sus afamados quesos, y se sitúa al sur del territorio histórico de
Gipuzkoa, en la comarca de Goierri. Emplazada en un entorno natural de
excepción, entre las sierras de Aralar y Aizkorri, se encuentra rodeada de
cimas que no superan los 1.000 metros de altitud, junto a la N-1, importante
nudo de comunicaciones que une Navarra, Álava y Gipuzkoa.
Puesto de Quesos en el mercado de Ordizia
El municipio cuenta con un Centro
de Interpretación y Degustación del Queso Idiazabal, donde se explica a los
visitantes, de una manera amena y divertida, la historia del queso y sus
procesos de elaboración trasmitidos generación tras generación. El primer domingo
de mayo, la localidad celebra el Día del Queso, una feria que gira en torno a
este producto y que reúne a numeroso público y a pastores procedentes de
Gipuzkoa, Bizkaia, Álava y Navarra.
de mi saldrá la mejor leche para hacer el mejor queso.
Idiazabal celebra sus fiestas patronales de San Blas a principios de febrero.
El día 3 de ese mes, además, es costumbre bendecir las famosas tortas de San
Blas, deliciosos bocados con sabor a anís. Una costumbre de gran tradición, al
igual que en otras localidades guipuzcoanas.
La DOP de Queso Idiazábal nació
en 1987 y cuenta en la actualidad con más de 500 ganaderías y 100 queserías
adscritas. Todas ellas, siguen un proceso muy estricto que permite obtener un
producto certificado de máxima calidad, que además, está entre mis quesos
favoritos del Mundo.
El queso Idiazábal puede
encontrarse tanto ahumado como sin ahumar, dependiendo de la tradición
culinaria de la localidad. Este queso, de gran calidad, proviene de una cuidada
elaboración familiar, de ahí las múltiples explotaciones que podemos ver en los
mercados de la zona.
Quesos Idiazabal dispuestos para la venta.
ARTZAI GAZTA es una
asociación sin ánimo de lucro que reúne a pastores del área de influencia de la
Denominación Oficial Idiazabal. La asociación produce el 53% del queso
Idiazabal.
La Asociación Artzai Gazta se
creó a mediados de la decada de los 80, con el objetivo de mejorar la calidad
del queso de pastor y apostar por su identidad. Actualmente agrupa a 107 socias
y socios repartidos entre las diferentes provincias de Álava, Gipuzkoa y
Bizkaia.
Objetivo de valorar el queso como
una tradición cultural y el trabajo ganadero como un valor para el desarrollo
rural biosostenible.
Pequeña representación de elaboradores de Idiazabal.
En 2015, estuvimos en la quesería
Joseba Insausti. Allí fuimos tras conocer la noticia que su Queso Otatza había sido galardonado como el mejor queso del mundo. La quesería
está en Ordizia, y como nos cuenta Joseba, la mayoría de su queso lo vende en la
propia quesería, no hace demasiadas piezas, sólo unas 3.000 al año.
Elabora dos tipos de quesos
Idiazábal. El queso del valle, en invierno y en primavera; y el queso de
montaña, hecho en la cabaña de la montaña, en primavera y verano.
"No compro leche, solo trabajo
con leche de la explotación. Mi
rebaño es tradicional de montaña, no es muy grande, y por eso la producción es
pequeña, pero de calidad "
Joseba y su Feliz rebaño
Del Campo a la Mesa.
El queso de Idiazabal, cuenta con
un Consejo Regulador, está elaborado con leche cruda de oveja latxa y
Karranzana de las sierras de Urbasa y Aralar. Se celebran importantes concursos
de este queso: Bilbao, Gernika, Huarte Arakil y principalmente el de Ordizia,
primer miércoles de Septiembre, coincidiendo con su mercado extraordinario.
Puesto de Quesos
Descubriendo Joyas en el puesto de la Abuela
Tradición Familiar pasada de Padres a Hijos.
Rebaño en la montaña. Quesos de Altura
Quesos y mas quesos
Premios y reconocimientos en Ordizia
Productos de la zona
El Camembert es un queso blando,
cremoso, con corteza de moho blanco y hecho con leche de vaca. Se trata de una
denominación genérica para designar quesos similares al Camembert de Normandía,
pero producidos en otras regiones de Francia, en Europa y en el mundo entero.
Pero de este queso os hablaremos
pronto, en un próximo Post, sobre la Marca Reny Picot, y como su visionario
dueño Francisco Rodríguez, ya en 1959, vio que el negocio de la Leche “no era
tal negocio” y menos en el mercado interior, y por ello constituyó la empresa
Industrias Lácteas Asturianas (Ilas) con el queso Camembert como su principal
oferta para dar un aire francés a su proyecto.
Buenos días GastroGenuinos, hoy os vamos a hablar de una familia centenaria en el buen trato al producto, de un producto que ya conocíamos en su formato básico, pero con un nombre con una historia familiar detrás de esas que nos gustan en GastroGenuino. Si, os vamos a hablar de Pimentón la Dalia.
Como he comentado, la familia Hernández se dedica desde hace más de 106 años a la elaboración, que no cultivo, de Pimentón de la Vera.
La historia de esta familia de productores nos la cuenta Álvaro, bisnieto y por tanto 4ª generación dedicada al “oro rojo”.
"Hola, mi nombre es Álvaro Hernández. Actualmente soy Gerente y administrador de la compañía Pimentón La Dalia , y 4ª generación desde su fundación en 1.913 por mi Bisabuelo.
Nuestra empresa se dedica principalmente a elaborar Pimentón de la Vera desde sus comienzos.
El cultivo de pimiento para pimentón en la zona de la Vera se introdujo a partir del siglo XVI, a través de los monjes Jerónimos del Monasterio de Yuste, después de su presentación en Guadalupe por Cristóbal Colon a los Reyes Católicos en su primera vuelta de América. Siendo el continente Sudamericano su origen.
Tradición y sabiduría se dieron la mano para acunar, desde la infinita calma del monasterio, el más preciado tesoro que los Jerónimos podían regalar a los sentidos.
Guardado el secreto celosamente tras las piedras del claustro, poco a poco comenzó a filtrarse su preparado, hasta que llegó a elaborarse de forma espontánea por familias con gran tradición agrícola.
Comienza a cultivarse por los agricultores de la Vera en pequeños bancales donde disponen de agua para riego, donde igualmente se cultivaba el lino, lo que dio por llamar “linares”, término que se acuña con el tiempo para describir los terrenos de regadío alrededor y próximos a los pueblos.
Se implanta como cultivo en grandes superficies en los regadíos de la zona a finales del siglo XIX, Desde entonces, se extiende por todo el valle, alcanzando fama y prestigio y convirtiéndose en una de las principales riquezas de la comarca, y es ya en el segundo tercio del siglo XX, cuando se amplían las superficies regables del río Tiétar, se incrementa su cultivo por la demanda existente. Se forman Sociedades Cooperativas de productores para realizar una comercialización conjunta del pimiento seco, llegando posteriormente a la comercialización del pimentón molido.
En La Vera, el pimiento para pimentón goza de un microclima privilegiado para su desarrollo natural.
Los pimientos cultivados son de la especie “Capsicum annum” y las sub-especies “cerasiforme y longum” que dan lugar a tres tipos de pimentón: Dulce, Agridulce y Picante.
Los pimientos, cuidadosamente seleccionados, se someten al proceso de secado tradicional de la Vera, diferente a los utilizados en el resto de las zonas productoras de pimentón.
Un hogar de leña de roble o encina, aporta el calor necesario para la perfecta deshidratación de los frutos.
Es un proceso lento, de diez a quince días, durante el cual manos expertas voltean con sabiduría los pimientos hasta conseguir el grado idóneo de secado.
El secado al humo de leña es consecuencia de los otoños lluviosos de la Vera, que hacía imposible el secado al sol, y puesto que es necesario secar los frutos rojos maduros para la obtención del pimentón, se recurrió a esta técnica, que a la postre se ha convertido en una de las características más distintivas del Pimentón de la Vera … su Sabor ahumado"
PIMENTÓN EN ESCAMAS
Todo este proceso de cultivo y secado es ajeno a las labores propias de Pimentón la Dalia, ya que ellos adquieren el pimiento ya seco y dispuesto a ser transformado … es como si recibieran un diamante recién extraído de la madre naturaleza y ellos se dedicaran a pulirlo y cortarlo … a darle valor.
Alvaro nos sigue contando que es a principios del siglo XX, cuando se produce la gran expansión del cultivo y como consecuencia se implantan industrias pimentoneras en los núcleos urbanos, alcanzándose una producción en 1.939 de ocho millones de kilogramos, tal como se recoge en el Diario ABC del Miércoles 12 de Junio de 1.940. En dicha crónica, el articulista D. Manuel Pérez Buendía titula “EL PIMENTÓN DE LA VERA, EN LA EXPOSICIÓN DE CÁCERES”, haciendo referencia a la presencia de los industriales como asociación llamada “Gremio de Exportadores de Pimentón de la Vera”.
Cuentan los relatos de la época que, en la otoñada, bajaban a la Vera los comerciantes de Castilla para llevarse el Pimentón de la Vera para las matanzas, antes de la llegada de las nieves, lo que implica el reconocimiento del Pimentón de la Vera desde tiempos ancestrales.
Retomando la historia familiar, es ahora Maria José … conocida como “ La Reina del Pimentón”, la que nos cuenta el origen de la empresa familiar y lo que más nos llamó la atención, el origen del nombre.
"La historia familiar se inicia con D. Valeriano Hernández Martín emigrando muy joven del Valle del Jerte a la comarca de la Vera, tierras imperiales y vergel de la naturaleza envuelta en gargantas naturales, con un microclima único y que marcarán el camino del bisabuelo.
VISTA PANORÁMICA DE LA FÁBRICA
Sus comienzos son como empleado de una pequeña tienda en Jaraíz de La Vera. Pero es en 1.913 cuando empujado por su espíritu emprendedor funda “La Dalia” empresa dedicada a la Elaboración de Pimentón de la Vera, y en 1920 cuando funda su primera fábrica. "
Se le iluminan los ojos, le tiembla la voz al hablar de su familia y del producto o mejor dicho, gama de productos, a los que representa en Madrid y por los que recibe el sobre nombre de Reina del Pimentón. Requerida en todos los eventos gastronómicos que se precien por su pimentón y querida por todos, por su simpatía y alegría.
ANTIGUO ANUNCIO DE PUBLICIDAD
Valeriano fue un pionero y visionario, que en un principio compraba el Pimentón molido a los pequeños agricultores que molían esos frutos ya secos en molinos de agua de las tantas gargantas que bañan la zona de la Vera, y luego con los transportes equinos de la época.
Así comenzó con la comercialización de este extraordinario producto y en cuanto le fue posible, construyó una de las primeras fábricas de Pimentón de la Vera de la zona.
Ahí es donde llega la más hermosa historia familiar … el nombre de la marca … la Dalia. Y es que cuenta la “leyenda familiar” que el nombre de la marca se debe a esta flor, a la Dalia, por ser la que utilizó Valeriano para declararse a la que fue su hermosa mujer Lucía.
FOTO FAMILIAR
Desde 1.913 La Dalia ha pasado de Padres a hijos hasta la actualidad. El comenzó como emprendedor, con una gran visión y confianza en el Pimentón de la Vera. Transmitió a sus descendientes, de manera encomiable, la gran historia del producto, valores culturales y compromiso, con la maravillosa tierra de la Vera y sus gentes.
FABRICACIÓN
Una vez el fruto seco, se procede en la fábrica a retirarle el pedúnculo, procediendo a su molturación en los diferentes tipos de molinos, no debiendo superar, en este proceso, los 50º C de temperatura para que no pierda sus cualidades organolépticas.
Para este proceso, se siguen utilizando los 7 molinos originales, a los que sólo se les ha cambiado la fuente de alimentación para adaptarlos a los tiempos modernos, pero que siguen dando esa calidad de antaño.
MOLINOS ANTIGUOS QUE SIGUEN MOLIENDO EL ORO ROJO
Una vez molido (pueden pasarse hasta 4 veces por la piedra), se homologa por calidades y se somete a los distintos controles y análisis establecidos por el reglamento de la Denominación de Origen “Pimentón de La Vera”, procediéndose a su envasado en sacos, latas y bolsas aquellos pimentones que han superado los anteriores controles.
DIFERENTES FASES DEL PIMENTÓN SEGÚN VA PASANDO POR LA PIEDRA
El pimentón de la Vera, presentará un aspecto pulverulento, color rojo intenso y sabor delicado y peculiar a humo de leña que evoca su proceso tradicional de secado.
Según su sabor se distinguen tres clases denominadas comercialmente:
- Pimentón Dulce: De sabor suave.
- Pimentón Agridulce: Ligeramente picante al paladar.
- Pimentón Picante: Pronunciado picor al paladar.
Como nos comenta Álvaro, el tradicional, el más famoso, es el Agridulce, es el que más le gusta, aunque comercialmente es más fácil encontrar el dulce.
También nos comenta que el proceso de secado y ahumado confiere al pimentón de la Vera una propiedad antioxidante, capaz de aumentar al doble el funcionamiento de los sistemas antioxidantes endógenos del organismo.
"Para mí, es un verdadero orgullo seguir contribuyendo a expandir el Pimentón de la Vera por cada rincón del mundo, pero más aún haber tenido en mi vida la oportunidad de dar continuidad el legado de mi Bisabuelo, Don Valeriano Hernández Martín, con una Marca centenaria “ La Dalia” y ser parte importante de un icono gastronómico como el Pimentón de la Vera, y ver como nuestro producto y esencialmente nuestra Marca La Dalia llega a las cocinas de innumerables países."
EMBAJADORES DE LA TRADICIÓN ESPAÑOLA
Recientemente hemos incorporado escamas de pimentón (que a parte de sus sabor, queda muy elegante en los platos), el preparado de especias para paellas con azafrán (para los que adoran los arroces y las paellas), el preparado de chimichurri para las carnes y el pimentón ecológico que han tenido muy buena acogida.
Como dicta su presentación “La tradición y el saber conforman el carácter de una empresa familiar volcada en su tierra y sus gentes. Es una forma de vivir y sentir los valores más tradicionales, que han alcanzado su máxima expresión en un producto único, autóctono y asentado en La Vera, donde aromas y sabores triunfan gracias a las excelencias del genuino Pimentón con Denominación de Origen Protegida".
LA FAMILIA "LA DALIA" ACTUALMENTE
ENVASADO A MANO
Nuestros procesos han sufrido una profunda renovación. En la actualidad, sabemos trabajar con las más avanzadas herramientas de elaboración, sin dejar de lado los procesos donde el factor tradicional sigue siendo un componente vital.”
Ya sólo queda … ponerse manos a la obra, y probar esta delicia en sus diferentes variedades y formatos … y como dice Jose María, nieto del fundador y alma mater de la empresa actualmente, unos huevos fritos con puntilla y coronado con un poquito de pimentón … es uno de los mejores manjares que actualmente podemos tomar.
Nosotros de momento, vamos a preparar unas migas extremeñas con nuestro cocinero y amigo Sebas … pronto os enseñaremos a prepararlas.
Sebas ... manos a la obra que tenemos hambre.
Os dejamos con un precioso vídeo de la Dalia, su historia y productos, disfrutadlo.
Hace un tiempo un nombre nos llamó la atención … “Salsa Sagrada”
Acababa de salir a luz fruto de la inquietud de Antonio Rodríguez, su
creador.
Nos pusimos en contacto con Antonio para saber más de esa salsa, pero
su respuesta fue que teníamos que probarla, y sólo así accedería a contarnos
los secretos de su Salsa Sagrada.
DETALLE DE LA SALSA
Pues bien, pasó el tiempo sin que esa oportunidad se diera … hasta que hace
unas semana tuvimos una sorpresa en casa, un paquete había llegado, era la
Salsa Sagrada acompañada de Embrujo, una nueva propuesta de Salsas y Aderezos
del Guadalquivir S.L, ésta con un poquito de picante.
Una vez más hicimos las preguntas
¿Qué llevan? ¿por qué el nombre de Salsa Sagrada?
Las respuestas … las mismas, “primero probadlas y luego hablamos”, eso sí, esta
vez …….. nos dio unas pautas para poder apreciarlas mejor, la puedes tomar
sola, añadida a cualquier guiso, arroz, adobando carnes o pescados, añadida a
la pizza, a la tortilla de patata, a la pasta, etc …
¿una salsa que sirve para todo? ¿una salsa natural?
¿un creador que confía
en su producto y en que este gustará si o si?
Demasiado bonito para ser cierto … ¿ o quizás sea verdad?
Sólo había una forma de saberlo … PROBAR, PROBAR y volver a PROBAR.
Dicho y hecho, hemos probado ambas de múltiples formas, en diferentes
ocasiones y lo que es más importante, con diferentes comensales. Os dejamos
fotos de algunas de las diferentes ocasiones en las que GastroGenuino ha usado
ambas salsas.
GastroGenuino prueba las salsas en todos los formatos que se le ocurren ...
Son unas salsas diferentes, que “enganchan” y que como bien decía Antonio …
“casan” con todo.
Son muy especiadas, la Salsa Sagrada desprende un olor característico que
recuerda mucho a los adobos del Sur … la Salsa Embrujo, con su ligero toque
picante se vuelve adictiva, una de las formas en que más disfrutamos de ella
fue poniéndola directamente sobre pan tostado calentito acompañada de una buena
copa de vino tinto.
Sin duda repetiremos, sin duda las recomendaremos, sin duda hemos quedado
embrujados.
¿Qué lleva la Salsa sagrada?
Salsa SAGRADA es una salsa natural 100% ( Sin aditivos),compuesta
por ingredientes naturales de la máxima calidad, como las
diferentes especias traídas directamente desde la india, esencia de
pimentones de la Vera, vinagres de melaza, ajos de máxima calidad y un largo
etc…
Las especias de un Mercado cualquiera en India
Como dicen que una imagen vale más que mil palabras, os dejamos un video
editado de un reportaje que hizo La Manzana de Eva a Antonio sobre su salsa Sagrada,
esperamos que disfrutéis tanto como nosotros lo hemos hecho al conocer estas
salsas y su historia.
Ah… y ya nos adelantan, que están trabajando en otros productos, de los que
os hablaremos pronto, muy pronto.
Esperamos que os haya gustado el reportaje y al probar la Salsa Sagrada nos lo comentéis.
Hola, soy Verónica y os voy a
contar un poco de mi historia familiar, concretamente la que se refiere a
nuestra Quesería.
Todo nació hace más de 30 años
gracias a mis abuelos Pedro Antonio Romero Romero y mi abuela Josefa Irnán de
la Calle.
Mis abuelos tenían
unas pocas ovejas y alguna cabra de las que vendían su leche en una pequeña
tienda de barrio que atendía mi abuela. Mi abuelo es una persona muy
emprendedora y con lo poco que tenía, siempre le gustaba hacer cosas nuevas, y un día se le ocurrió probar a hacer queso, eso si, siempre con leche de oveja que a él le
gustaba más.
De esta prueba
surgieron los quesos que actualmente comercializamos (el tierno, el especial para aceite, Semicurado, Curado, Curado con Manteca, Curado con Pimentón, Curado con Romero y el curado en Aceite) , de entre todos ellos destaca
el queso al Romero, elaborado con la fórmula secreta del abuelo. GastroGenuino
nos ha pedido elaborar un video fabricando este queso … pero lo Secreto …
secreto es … je,je,je.
Para para algunos
clientes dejamos quesos guardados mucho más tiempo hasta que
tienen el color rojo característico que tienen los quesos muy
curados y el sabor es picante.
La tradición nos
viene de él, sus hijos siguieron con el negocio y nos hemos incorporado los
nietos con los años.
Sus hijos fueron
de mayor a menor Pedro Antonio, José, Evarista y Maparicio.
Los hijos varones
junto con mi padre Pedro Campos se dedicaron a la ganadería y cuando se
casaron los tres más mayores se abrió la quesería y las mujeres de éstos
junto con mi madre, Evarista (hija) llevaron el negocio del queso que mi
abuelo había comenzado.
Actualmente nos hemos incorporado
alguno de los nietos, mis primos Pedro Antonio, Raúl y Cristian en la sección
de Ganadería y mi prima Estela y yo en la quesería.
Nosotros queremos
seguir con nuestra fabricación artesana, siempre tienen en mente el tema de
expandirse, pero sabemos que si te conviertes en una empresa grande y con mucha
producción la calidad del producto se reduce a nada.
Por ejemplo, nosotros
tenemos nuestra propia ganadería y creemos que esa el clave fundamental de
tener una calidad superior al resto, mi familia tiene una gran experiencia en
este sector ya que saben cuáles son las mejores
comidas para las ovejas y cómo hay que cuidarlas para tener
una leche de mucha calidad.
Una de las notas características
de nuestro modo de trabajar es que procesamos la leche a las 2 horas de ser
ordeñada, con lo cual no pierde ninguna propiedad, como si ocurre con los
quesos que se elaboran con leche que ha sido congelada.
Os voy a contar aun poco más sobre mi y el motivo por el cual me dedico en cuerpo y alma a nuestra pequeña empresa familiar. La empresa familiar para mi significa seguir con una noble tradición familiar que, con mucho cariño y esfuerzo, ha conseguido prosperar durante más de 30 años, todo ello gracias al sacrificio diario que han sabido llevar tanto mis abuelos como mis padres y tios.
Verónica y uno de sus pequeños
Actualmente me dedico 100% a la empresa, ya que al terminar mis estudios, con 18 añitos, tenía muy claro cuál quería que fuese mi futuro, por ello, además de la producción diaria del queso, me encargo de los temas administrativos, de publicidad, de las redes sociales ... por eso de estar en conexión más directa con la tecnología por edad que el resto de mi familia, pero también del reparto del queso a los clientes.
mi madre y mi tia posan orgullosas
Es nuestro sustento familiar, un modo de vida dedicado a nuestro producto, a nuestros animales, mimando hasta el más mínimo detalle para contentar en la medida de lo posible a todos nuestros clientes y con ánimo de seguir mejorando y progresando con los años, pero sin perder la esencia de los quesos del Abuelo.
No solemos asistir a las ferias,
se necesita invertir mucho dinero y tiempo, y somos una pequeña empresa
familiar, lo que si que hacemos es recibir en nuestras instalaciones a todos
aquellos que quieran conocernos y saber más sobre nuestros quesos, haciéndonos
especial ilusión la visita de los niños.